sábado, 27 de noviembre de 2010

Cuando el amor os llegue

Hoy estaba leyendo algunas cosillas que tengo por ahí, y he encontrado esto que guardé hace mucho tiempo, pensando en vosotros.
Pensé que algún día querría deciros algo así, pero nunca podría expresarlo mejor.
Cuanto más tiempo pasa, cuanto más mayor me hago y cuantas más vivencias acumulo, más sentido cobra y más auténtico me parece.
Leed despacio y meditadlo, porque creo que es de los más sabios consejos que se puedan dar.

Cuando el amor os llegue,
seguidlo,
aunque sus senderos sean
arduos y penosos.
Y cuando os envuelva bajo
sus alas, entregaos a él,
aunque la espada escondida
entre sus plumas os hiera
Y cuando os hable, creed en él,
aunque su voz sacuda vuestros sueños,
como hace el viento del norte
que arrasa los jardines.
Estad juntos, pero dejad que
crezcan espacios en vuestra cercanía,
y dejad que los vientos del cielo
libren sus danzas entre vosotros.
Amaos con devoción,
pero no hagáis del amor una atadura,
haced del amor un mar móvil
entre las orillas de vuestras almas.
Llenaos uno al otro vuestras copas,
pero no bebáis de una misma copa,
compartir vuestro pan,
pero no comáis del mismo trozo.
Cantad y bailad juntos.
Y estad alegres, pero que cado uno de
vosotros sea independiente.
Las cuerdas de un laúd
están separadas aunque vibren con la misma música.
Dad vuestro corazón, pero no para que
vuestro compañero se adueñe de él,
porque solo la mano de la vida puede
contener los corazones.
Y permaneced juntos, pero no demasiado juntos,
porque los pilares sostienen el templo,
pero están separados.
Y ni el roble crece bajo la sombra del ciprés,
ni el ciprés bajo la del roble.
———
Khalil Gibran

martes, 16 de noviembre de 2010

Como contaros...

Como contaros lo que siento… Ha ocurrido todo tan rápido…
Hace dos años que te fuiste, mi pequeño (tenías 21 años)… La profesión que elegiste te obligó a dejar tu casa y tu tierra. Las circunstancias hicieron que últimamente pasaras seis meses con nosotros y, por ello, me volví a acostumbrar a tenerte, hasta tu nueva partida en Junio pasado. 
En Agosto tú, mi niña, la mayor, con 27 años has decidido que ya es hora de independizarte e instalarte en tu propia casa, esa que con tu esfuerzo has conseguido y con tanta ilusión has convertido en tu hogar.
Quedábamos tú y yo, mi hijo mediano, con 25 años, pero tu decisión de terminar tu carrera en otro país te lleva a más de 2.000 kilómetros de casa, justo a un mes escaso de la partida de tu hermana.
Habéis volado los tres al mismo tiempo, demasiado rápido, y creo que no estaba preparada para ello.    
Esta casa, que siempre ha sido grande para albergar nuestra familia, ahora es enorme y pesa mucho…
Y sobran habitaciones, muebles, espacio…
Y falta ruido, movimiento…
El silencio me aturde…
Por suerte lo tuyo, Al, en principio es solo para un curso académico (espero), y de cualquier forma este período me servirá de entrenamiento para cuando tu también vueles definitivamente. 
Vuestra partida es ley de vida, y sabía que algún día tenía que ocurrir, pero…
Como contaros que a pesar de saber que es un proceso natural, y de sentirme totalmente orgullosa de que os hayáis convertido en tres adultos maduros e independientes, seguís siendo mis niños
He querido crear este espacio para poder contaros cosas y compartir sentimientos en esta nueva etapa de nuestras vidas.
Os deseo la mayor felicidad. Os quiero